El hombre ideal es un mito. Su perfume, una realidad. Guerlain decodifica las aspiraciones humanas y crea para ellos un concentrado de ideal. ¿El perfume perfecto? Inteligente, bello y fuerte. Tres calificativos, tres acordes para la fragancia amaderada fresca que revelará todo su potencial. ¿El frasco ideal? Masculino, lujoso y distinguido. Un misterioso caso, un objeto gráfico en blanco y negro, un código QR como invitación a un viaje digital. Un frasco, cuadrado, tallado y elegante, lujoso. Las caras laterales pintadas de negro mate radical. Una cubierta pesada, mate también, decididamente masculina, que toma prestadas líneas entrecruzadas con el mundo de la relojería.